Amanda, especialista en piel en el Salón de Belleza de Erna y fanática de la comida, ve diariamente a mujeres (y hombres) en su salón con problemas de piel. Desde una piel apagada y flácida hasta una piel demasiado grasa con inflamaciones. Nos explica cuál es la relación con la comida…
Me encanta comer y sobre todo comer bien
Sin embargo, un pastel se queda directamente en mis caderas y ahora sé que no tolero bien el gluten y la lactosa. Así que, en resumen, sé mejor que nadie lo difícil que es consumir la comida adecuada. Pero también sé lo importante que es comer bien. Lo digo especialmente bien porque lo que es bueno es diferente para cada persona. Una persona vive bien con un bocadillo de queso holandés, mientras que en mi caso parece que estoy embarazada de cuatro meses (vientre hinchado) y eso sin mencionar los días de dolor abdominal.
Ahora bien, no todos tienen que tener dolor abdominal, pero sí veo cada vez más mujeres mayores de 25 años que sufren, por ejemplo, de acné. Esto puede deberse a un desequilibrio hormonal, pero la comida a menudo también juega un papel importante. Lo que ingieres debe de alguna manera salir y si, entre otras, nuestro hígado no puede procesarlo adecuadamente, esto puede reflejarse en la piel.
Conócete a ti misma (y a tu piel)
¿Tienes problemas de piel agitada, inflamaciones, manchas rojas o zonas secas y no sabes bien por qué? Lo que funciona muy bien para mis clientes en el salón de belleza es llevar un diario (de la piel) durante un mes. Es un poco de trabajo, pero puede rendir mucho. Y recuerda: el mejor experto para tu piel eres tú misma. En tu diario anota:
- Lo que comes (también esos pequeños bocados entre comidas o ingredientes raros, especias);
- Indica tu nivel de estrés (0 es sin estrés y 10 es con ruedas chillando hacia una isla desierta);
- En qué fase de tu ciclo menstrual te encuentras;
- Cuándo te sale un granito, manchas rojas, etc.
La comida necesita tiempo para digerirse… y para llegar a tu piel
No tiene por qué ser que al día siguiente te salga un granito de lo que comes, a menudo tarda unos días. Si ya piensas que toma 24 horas desde que la comida va de tu boca al retrete, entonces entenderás que crear una inflamación en 24 horas es bastante rápido. ¿Tienes una idea de a qué reaccionas? Entonces prueba a eliminarlo de tu dieta por al menos un mes.
Te daré un ejemplo. Una mujer en mi salón, de unos 30 años y con una vida ocupada, sufría de acné, realmente grandes inflamaciones. Como especialista en piel, estoy convencida de que ocasionalmente puede haber una espinilla o granito, pero tener muchas grandes inflamaciones ciertamente a esa edad no es necesario. Por supuesto, comencé a tratar su piel y ella comenzó a usar buenos productos para el cuidado de la piel. Pero también examinamos lo que comía. A menudo empiezo con los productos lácteos. Está científicamente comprobado que la caseína (proteína) puede causar o empeorar muchas inflamaciones y, por lo tanto, acné. Estas inflamaciones no tienen que ser necesariamente acné. También en otras partes del cuerpo pueden surgir o empeorar inflamaciones. Lo que hizo esta mujer fue no comer queso durante un mes. No cambiamos mucho más. ¡La diferencia fue enorme! Creo que tenía un 75% menos de inflamaciones. Después de unos meses empezaron a surgir más inflamaciones… Resultó que ella había vuelto a comer bastante queso.
Incluso si no tienes problemas de piel, tu piel siempre mejora con una alimentación saludable
El tono mejora y tu piel adquiere un brillo bonito. Entre otras cosas, al beber mucha agua, tu piel comienza a brillar más. Personalmente, comencé a seguir los libros 50 Días de Green Happiness. En mí misma, pero también en mis clientes veo resultados hermosos para la piel.
En el salón de belleza de Erna utilizan principalmente productos naturales y ofrecen tratamientos para mejorar la piel. Merel y yo (Tessa) conducimos con gusto desde Ámsterdam porque realmente aquí te consienten y además notas el efecto en tu piel.